miércoles, 3 de diciembre de 2014

¡¡¡Mi hija (o) está enamorada (o)!!!

No se preocupen. Je je je. Más adelante escribiré un poco más sobre esto; mientras les comento que el enamoramiento producirá en nuestros hijos ciertos cambios en algunos hábitos: quita el sueño o por el contrario, se duerme mejor que nunca. Produce inapetencia o un hambre atroz. Además todo ello acompañado de inusitada palidez, rubor, palpitaciones, ansiedad o loca euforia. Mientras esté enamorada (o) y sea correspondida (o), nuestro chica (o) se sentirá plena (o) y feliz. Disfrutemos con ellos su felicidad...

martes, 2 de diciembre de 2014

Padres y Madres PRESENTES...

Recuerden: Padres y madres presentes forman hijos con una mejor autoestima y confianza. A sabiendas del estrés que podemos vivir a diario y de nuestros compromisos, saquemos un espacio para nuestros chicos. A la hora de comida, en la cena, al llegar del trabajo.... ¡Es necesario estar presentes!

Buenas noches...

Lo que no puede faltar antes de que nuestros hijos se duerman: además del beso de buenas noches, unas palabritas chulitas que lo animen, lo motiven y le hagan sonreír. Les aseguro que tendrán un sueño placentero. Y no importa la edad que tengan. Ellos siempre (aunque no lo externen) verán y recibirán con agrado el beso de las buenas noches.

El adolescente frente a las normas

Le hablamos de reglas y normas a nuestros chicos y ¿qué hacen? Forcejean, critican intentan razonar a su favor, gritan o se ponen en plan incómodo para salirse con la suya. Los padres no tenemos por qué doblegarnos y ceder en el límite impuesto, pero sin duda deben escuchar. Si el argumento del adolescente es razonable, sereno y válido, los padres pueden considerarlo, dialogar sobre él y actuar en consecuencia. Si por el contrario el joven insiste en embestir a capricho contra la norma, solo conviene escucharle hasta cierto punto y en un determinado momento hay que dar por zanjada la cuestión.

Peleas entre hermanos, ¿qué hacer?

La rivalidad entre hermanos es una constante en todas las familias y, cuando se produce entre adolescentes, puede llegar a adquirir un nivel de violencia preocupante. Cuando se pelean sin violencia, es mejor no intervenir, separarse e instar a los hermanos para que arreglen la disputa por su cuenta. ¿Funciona? Si. Pasará que o terminan estableciendo una tregua que no tiene porqué coincidir con la que hubieran deseado los padres, pero que permitirá el cese del conflicto o continuarán insistiendo y se las arreglarán para enredar incluso la resolución más neutral. Cuando hay violencia física, la intervención de los padres es VITAL. Deben dejar muy claro que harán todo lo posible para impedir que uno de los hermanos haga daño físico a otro. El adolescente debe entender de manera tajante que cualquier amago de violencia en el hogar se considerará absolutamente intolerable.

Hoy nuestros chicos nos necesitan...

Papás, mamás, ATENCIÓN con esto...

¿Cómo sobrevivir a la adolescencia?

Ánimo. Todo pasa y son temporadas en las que nuestros chicos necesitan más de nuestra fortaleza y paciencia. Recuerden que nosotros fuimos adolescentes también. Comprensión, paciencia y nunca ceder ante lo que sabemos es lo correcto.

¿Tu hijo adolescente tiene el síndrome del "Demasiado"?

Soy de demasiado alta, soy demasiado feo, tengo la nariz demasiado grande, estoy demasiado gorda, tengo las piernas demasiado delgadas, tengo demasiados granos en la cara... Papás, mamás, no se alarmen pues en esta etapa de la adolescencia este síndrome es normal. Es una actitud provocada por los cambios que se están sucediendo en su cuerpo. Recuerden que comienza en ellos una transformación corporal que a la vez desata una batalla de sentimientos contradictorios y enormemente inquietantes que les afectarán en su día a día. ¿Qué nos queda? Solo tenemos que tener paciencia y entender un poco a nuestros chicos. ¡Suerte!