miércoles, 10 de diciembre de 2014

¿Qué debe hacer la madre o el padre de un adolescente si descubren que su hija o hijo se autolesiona o como dicen en su lenguaje "se hacen cutting"?

Lo primero que deben saber es que aunque se trata de una conducta con la que es muy difícil acabar, puede hacerse. Hay muchos jóvenes que han recibido tratamiento y han dejado de auto lesionarte y otros, lo han dejado por sí mismos sin necesidad de ayuda terapéutica. Pero si una madre o un padre descubre que su hijo tiene esta conducta lo primero que debería hacer es hablar con el adolescente. Y es muy importante también que si no sabe cómo enfocar la conversación, la primera recomendación es que, incluso antes de hablar con su hijo, acuda a un especialista para que le ayude. Él puede recomendarle cómo llevar esa conversación.

¿Premiar con dinero la mejora de las calificaciones?

Ay ay ay, ¿cuántas veces hemos cometido ese error? Los resultados los hemos visto. Lamentablemente premiar con dinero la mejora de las notas es un error muy común. El que saca buenas notas trabaja para sí mismo y no para complacer a los padres, profesores o amigos. La recompensa económica suele echar por tierra el verdadero sentido de conquista académica; ya no se hace un esfuerzo para obtener placer sino dinero. Es importante saber que: El alumno no suspende o aprueba por dinero; cualquier éxito académico implica que ha sido capaz de domesticar una voluntad quebradiza, que ha conseguido hacer libremente un buen trabajo y sobre todo, que siente gusto por la obra bien realizada.

¿Comienza la semana con el estrés de los exámenes de los chicos?

Tranquilos... demos a nuestros hijos un voto de confianza. "Valoremos su esfuerzo, no el logro". Las notas escolares evalúan solo parte de la inteligencia. Estemos presentes, que ellos entiendan que los estudios son parte de su responsabilidad pero no cometamos el error de presionarlos. Supervisemos su método de estudio y alentemos a nuestros chicos con palabras comprensivas, abrazos, besos y siempre un: TU PUEDES.

Drogas en la adolescencia

Papás, mamás,... Leyendo, metida en foros, en grupos me he quedado fría al conocer la alta tasa de jóvenes adictos a las drogas que iniciaron con apenas 10 y 11 años. Debemos hablar con nuestros chicos desde ya sobre este tema. Debemos crear conciencia sobre las consecuencias del uso de las drogas. Un dato importante es que todos los que hacen proselitismo de la droga acosan a los que no tienen capacidad ni formación para reaccionar contra ella. Los nuevos consumidores están en los primeros cursos escolares y cuentan con 10 años de edad. ¡Dios! Si no nos hemos preocupado de fomentar el diálogo y la comunicación con nuestros chicos antes de que éste llegue a la adolescencia, nos resultará muy difícil hacerlo después. Es hora de tomar acciones y comunicarnos con ellos. Saquemos ese espacio pues mañana puede que sea tarde.

Mamá es domingo, ¿puedo ir con unos amigos al cine?

No impida que su hijo (a) se relacione con otros jóvenes de su edad durante los fines de semana, porque "son días para estar en familia". Mamá, papá,...sepan que es precisamente fuera de la jornada escolar donde la relación social es más sincera y distendida. Dígale que sí. Su hijo (a) necesita socializar.

miércoles, 3 de diciembre de 2014

¡¡¡Mi hija (o) está enamorada (o)!!!

No se preocupen. Je je je. Más adelante escribiré un poco más sobre esto; mientras les comento que el enamoramiento producirá en nuestros hijos ciertos cambios en algunos hábitos: quita el sueño o por el contrario, se duerme mejor que nunca. Produce inapetencia o un hambre atroz. Además todo ello acompañado de inusitada palidez, rubor, palpitaciones, ansiedad o loca euforia. Mientras esté enamorada (o) y sea correspondida (o), nuestro chica (o) se sentirá plena (o) y feliz. Disfrutemos con ellos su felicidad...

martes, 2 de diciembre de 2014

Padres y Madres PRESENTES...

Recuerden: Padres y madres presentes forman hijos con una mejor autoestima y confianza. A sabiendas del estrés que podemos vivir a diario y de nuestros compromisos, saquemos un espacio para nuestros chicos. A la hora de comida, en la cena, al llegar del trabajo.... ¡Es necesario estar presentes!

Buenas noches...

Lo que no puede faltar antes de que nuestros hijos se duerman: además del beso de buenas noches, unas palabritas chulitas que lo animen, lo motiven y le hagan sonreír. Les aseguro que tendrán un sueño placentero. Y no importa la edad que tengan. Ellos siempre (aunque no lo externen) verán y recibirán con agrado el beso de las buenas noches.

El adolescente frente a las normas

Le hablamos de reglas y normas a nuestros chicos y ¿qué hacen? Forcejean, critican intentan razonar a su favor, gritan o se ponen en plan incómodo para salirse con la suya. Los padres no tenemos por qué doblegarnos y ceder en el límite impuesto, pero sin duda deben escuchar. Si el argumento del adolescente es razonable, sereno y válido, los padres pueden considerarlo, dialogar sobre él y actuar en consecuencia. Si por el contrario el joven insiste en embestir a capricho contra la norma, solo conviene escucharle hasta cierto punto y en un determinado momento hay que dar por zanjada la cuestión.

Peleas entre hermanos, ¿qué hacer?

La rivalidad entre hermanos es una constante en todas las familias y, cuando se produce entre adolescentes, puede llegar a adquirir un nivel de violencia preocupante. Cuando se pelean sin violencia, es mejor no intervenir, separarse e instar a los hermanos para que arreglen la disputa por su cuenta. ¿Funciona? Si. Pasará que o terminan estableciendo una tregua que no tiene porqué coincidir con la que hubieran deseado los padres, pero que permitirá el cese del conflicto o continuarán insistiendo y se las arreglarán para enredar incluso la resolución más neutral. Cuando hay violencia física, la intervención de los padres es VITAL. Deben dejar muy claro que harán todo lo posible para impedir que uno de los hermanos haga daño físico a otro. El adolescente debe entender de manera tajante que cualquier amago de violencia en el hogar se considerará absolutamente intolerable.

Hoy nuestros chicos nos necesitan...

Papás, mamás, ATENCIÓN con esto...

¿Cómo sobrevivir a la adolescencia?

Ánimo. Todo pasa y son temporadas en las que nuestros chicos necesitan más de nuestra fortaleza y paciencia. Recuerden que nosotros fuimos adolescentes también. Comprensión, paciencia y nunca ceder ante lo que sabemos es lo correcto.

¿Tu hijo adolescente tiene el síndrome del "Demasiado"?

Soy de demasiado alta, soy demasiado feo, tengo la nariz demasiado grande, estoy demasiado gorda, tengo las piernas demasiado delgadas, tengo demasiados granos en la cara... Papás, mamás, no se alarmen pues en esta etapa de la adolescencia este síndrome es normal. Es una actitud provocada por los cambios que se están sucediendo en su cuerpo. Recuerden que comienza en ellos una transformación corporal que a la vez desata una batalla de sentimientos contradictorios y enormemente inquietantes que les afectarán en su día a día. ¿Qué nos queda? Solo tenemos que tener paciencia y entender un poco a nuestros chicos. ¡Suerte!